Se dice popularmente que las desgracias van acompañadas, "de dos en dos". Durante estos últimos 4 años mi corazón compartía dos desgracias simultáneamente. En Memoria, narro la historia de un internamiento en un centro de auxilio a personas vulnerables. ¿Cómo es la vida es los pacientes en estos lugares? 
Lejos de lo que a priori se podría pensar, no es una vida sencilla. Sus pequeñas tareas no son triviales para ellos. Los lazos de unión entre los trabajadores y los pacientes llegan hasta tal punto, que prácticamente son familia, y sienten cada partida como si fuera algo propio.
Fotografiar en esta situación no es algo sencillo, tienes que combatir con el dolor y la tristeza para centrarte en documentar y narrar las situaciones que se van sucediendo antes tus ojos y en muchas ocasiones, no son algo fácil de digerir.

Una vez más, la fotografía ha demostrado ser una buena terapia para sobrellevar el proceso del duelo. 

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